El último signo del zodíaco es Piscis. Regido por Neptuno, asociamos su energía al mundo de lo etérico y espiritual. A la imaginación, la inspiración, los sueños y el amor incondicional. Ensueño es la capacidad de imaginar y crear otras realidades. Es una carta onírica, nebulosa, intangible. Es finalmente nuestra capacidad de percibir con nuestros 4 cuerpos (espiritu, mente, alma y cuerpo físico). Es la sabiduría y el amor incondicional, la disolución de los límites tangibles o "reales".
Piscis - 1 decanato - Piscis
Esta carta puede traer bruma o claridad. La alineación de los 4 cuerpos nos conecta con una percepción diferente de lo que llamamos realidad. Podemos ver más allá de los hechos circundantes y tangibles y comprender las conexiones que se desprenden. También puede significar estar nadando en nuestros sueños sin una guía clara de nuestra dirección o de la manifestación de los mismos. Es ciertamente una manifestación de creatividad, de inspiración, un desborde de imaginación. Pero corremos el riesgo de no concretarlo, porque la energía piscis es volátil, a veces demasiado optimista, evasiva o poco realista. Alinear nuestros cuerpos es conectar con el propósito más allá de lo que podemos ver a nivel tangible. Existe una sincronicidad, una conexión invisible con el todo del que somos parte.
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